¿Dónde viven los peces abisales?

Distraída,
emerge tu voz abisopelágica,
tu mutismo, 
vuelves a surcar mi mar profundo.


Aislado del mundo,
circundante en la tierra,
ensimismado en el monasterio
en la India,
vieja madre, conectando dos mundos.


Estoy en el silencio,
no hay lugar para bahías,
la isla que he hecho es el refugio correcto,
incluso para tí,
extraño.


Me preguntaré ¿por qué?, ¿para qué
del modo tuyo?
Ese, el que tanto daño me hace,
ese, el de desaparecer
ese, que me señala como impura,
monje de Medio Oriente.

Danza sin fin,
sin causa
sin condiciones
¿cuál existencia?
Profunda distancia

rompiendo, sacudiendo, desolando, des-ilusionando.

Aislamiento vs Silencio.
No hay tregua,
Gran engullidor
sin sufrimiento
impermanente
dolor siento
sin alejarme del presente
me vuelco al Océano-Metta.


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